miércoles, 18 de mayo de 2011

El deseo de ser feliz en algunos casos puede hacer que las personas se sientan miserables

A conclusiones inesperadas llegaron los investigadores de la Universidad de Yale, de la Universidad de Denver y de la Universidad Hebrea de Jerusalén. La conclusión más importante es que no todos los tipos de felicidad son buenos. Los resultados del estudio fueron publicados en la revista Perspectives on Psychological Science
Los científicos revelaron que la felicidad misma o el deseo a la misma puede conducir a cambios negativos de la mentalidad, y incluso a reducir la duración de la vida.
Los científicos efectuaron una serie de investigaciones que confirmaron que, para el ser humano, la felicidad más probablemente es un factor negativo. Por ejemplo, descubrieron que las personas que en su niñez fueron felices y sin preocupaciones, viven en promedio menos que sus compañeros desdichados. 
Los científicos se basaron en datos recogidos de personas, cuyas infancias se desarrollaron en los años de 1920. Se reveló que aquellos que estudiaron con fervor y alegría, según observaciones de sus maestros, vivieron una vida más corta  en comparación  con los estudiantes con tristeza. Los investigadores creen que la felicidad plena - es un problema. El alto grado de este sentimiento hace que las personas se confundan, es decir que se vuelven más descuidadas y propensas al riesgo. La felicidad, literalmente los embriaga. Y,
como se sabe, despues del riesgo, siguen los disgustos que pueden influir en la duración de la vida de la persona. 
Los científicos culpan también a los libros de autoayuda que la gente compra para aprender la forma de alcanzar la felicidad. Los lectores recogen información y inician la carrera por la búsqueda de la felicidad, en la que probablemente tendrán fracazos, por los que se sentirán aún peor que antes de la lectura de los libros "tutores". 
 Otro problema que existe es que el sentido de la felicidad es simplemente improcedente en nuestro mundo. Por ejemplo,  si los amigos se encuentran en desgracia, uno no tiene por que brillar de felicidad, si no más bién uno tiene que dominarse. Esto significa que la felicidad es capaz de producir graves molestias.  
Además, la felicidad a veces implica el saber olvidar rápidamente las emociones negativas. ¿Y cuáles son estas emociones? Provienen de la experiencia negativa. Si se les olvida, la gente cometerá el mismo error que puede conllevar a consecuencias trágicas. 
Los resultados de este estudio no deberían de interpretarse como una sugerencia para abandonar la meta de la felicidad, según el expero Iris Mauss de la Universidad de Denver y el investigador Maya Tamir de la Universidad de Jerusalén.
"El factor de mayor influencia en la felicidad no es el dinero ni el reconocimiento del éxito y la fama, sino las relaciones sociales significativas. Si existe una cosa en la que se centrarse, se debe de centrar en eso. Hay que dejar que el resto ocurra como sea", sentenció el líder del equipo de investigación, June Grubber de la Universidad de Yale.   
Es curioso que los investigaron crean que en las personas felices, disminuyan sus capacidades de pensar creativamente. En relación con todo esto, los científicos recomiendan: dejar de preocuparse de ser feliz, que es lo que a última instancia conduce a la verdadera felicidad.
Con esta recomendación esta de acuerdo también la profesora de la facultad de Psicología de la Universidad Lomonosov de MoscúOlga Miélnikova, quíen estudió muchas investigaciones científicas sobre este tema tanto de Rusia y deOccidente.  
"¿Porqué  las personas más creativas, como regla general, son menos felices? - explica ella: Ellos toman en cuenta mayor cantidad de circunstancias. Una sola precepción sencilla de la felicidad, posiblemente no implique algo de creatividad ni imaginación. La persona no debe de perseguir en sus aspiraciones el máximo concepto de la "felicidad", sino que debe de tender al desarrollo personal, al uso máximo de su potencial". 
(fuentes: RBC daily, Science Blog

No hay comentarios:

Publicar un comentario